Efectos en el bajo (VI) – El “Bass Synth”

En los años 70 y 80 se popularizaron mucho las líneas de bajo tocadas en un sintetizador. Se comercializaron algunos teclados y sintentizadores especializados en el registro bajo. En la música más bailable el bajo eléctrico se vio desplazado en muchos casos por un teclado:

Este familia de sonidos sintetizados se ha tratado de reproducir desde el bajo y la guitarra. Durante los años 80 se desarrollaron bastantes sistemas de guitarra (y bajo) MIDI con mayor o menor acierto.

Guitarras y bajos sintetizadores

Para entender a fondo la síntesis, recomendamos el curso de síntesis  de Hispasonic. Es una materia compleja y aquí vamos a hacer solo un breve esbozo. Para generar un sonido sintetizado, se parte de una forma de onda básica (puede ser sinusoidal, cuadrada, triangular,…) y sobre esta empezamos a aplicar todos los recursos de la síntesis (osciladores, filtros,…)

La configuración básica de un sintetizador es un teclado activando una determinada frecuencia base para cada tecla. Si queremos trabajar con un instrumento de cuerda como origen de la onda que posteriormente trataremos, nos enfrentamos con dificultades: las notas que tocamos en un bajo (u otro instrumento de cuerda) se compone de una fundamental y una serie de armónicos, con lo que no tenemos una onda básica con una frecuencia determinada, si no un conjunto de diferentes frecuencias sonando simultáneamente.

Armónicos al tocar la cuerda A al aire. Nótese como el primer armónico (que corresponde a la octava) suena ligeramente por encima de la fundamental.

Esta es la primera dificultad: para comenzar la síntesis, solo nos interesa la fundamental como frecuencia de partida para trabajar sobre ella. La primera tarea que debe realizar nuestro sintetizador de instrumento de cuerda es aislar esta fundamental e ignorar los demás armónicos. Una vez aislada esta frecuencia, pueden entrar en funcionamiento todos los filtros, osciladores y el procesado típico de un sintetizador.

La siguiente dificultad es tratar el caso en el que se tocan varias notas simultáneamente (polifonía). Veámoslo en el siguiente gráfico. Vamos a suponer que tocamos simultáneamente la cuerda A y la cuerda G.

Serie armónica de la cuerda A al aire
Serie armónica de la cuerda G al aire

 

A nuestro hipotético sintetizador le llegará esto cuando toquemos las dos cuerdas a la vez:

Superposición de la serie armónica de las cuerdas A y G al aire

 

Si fitramos para dejar solo la frecuencia más baja, perdemos la nota G. Alrededor de 100Hz hay dos frecuencias activas, una es el primer armónico de A (otro A octavado) y la otra es G. Es bastante complicado separar estas dos notas simultáneas de todos sus armónicos en tiempo real. A día de hoy (finales de 2018) solo algunos equipos son capaces de hacer este análisis en tiempo real y trabajar con señales polifónicas de forma efectiva en tiempo real y sin retardos (por ejemplo, el Boss SY-300 del que hablábamos hace un tiempo, algunos pedales de Electro Harmonix y TC Electronic, etc).

La otra solución a este problema de la polifonía es aislar y trabajar con la señal de cada cuerda por separado. Esta aproximación es la que se tomó con las series de instrumentos MIDI de Roland (sistema GR) y otros fabricantes (por ejemplo, Peavey y su MIDI Bass). Esta última solución tecnológica además facilita la conversión de tono a MIDI.

Sintetizadores para bajo

En el caso de las líneas de bajo, partimos de una premisa: casi siempre son monofónicas, una nota cada vez, con lo que el dispositivo electrónico puede simplificarse y configurarlo para que filtre todas las frecuencias por encima de la más grave. No es una detección precisa, pero es lo suficientemente fiable para trabajar con esta señal. Una vez que tenemos esta señal «limpia», se pueden aplicar todas las típicas transformaciones que encontramos en los sintetizadores clásicos.

Características y controles típicos de estos pedales

Decay: controla el tiempo de decaimiento de la nota desde el pico de sonido más brillante (resonance).

Resonance: frecuencia a la que el filtro destaca el sonido o lo hace más brillante.

Waveform: algunos pedales pueden generar una onda a partir de la que nosotros tocamos. En este caso el pedal no utiliza el sonido del bajo, la fuente de sonido es un oscilador interno, el bajo lo único que hace es «decirle» al oscilador «estoy tocando A, estoy tocando C#…». Podríamos tener una escoba con cuerdas y el sonido sería básicamente el mismo (suponiendo que el pedal detectase bien la nota).

Drive/Octave: algunos pedales añaden un control de distorsión o fuzz, otros, un octavador.

Mix: muchos pedales permiten mezclar el sonido sintetizado con el propio del instrumento.

Veamos algunos de los más conocidos:

Sé el primero en comentar

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


*


Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.